Mi sombra dice que reírse
es ver los llantos como mi llanto.
Y me he callado, desesperado.
Y escucho entonces: la tierra llora.
La era está pariendo un corazón.
No puede más, se muere de dolor,
y hay que acudir corriendo
pues se cae el porvenir
en cualquier selva del mundo,
en cualquier calle.
Debo dejar la casa y el sillón.
La madre vive hasta que muere el sol,
y hay que quemar el cielo
si es preciso, por vivir.
Por cualquier hombre del mundo,
por cualquier casa.
treball: Al final de este viaje.
música i lletra: Silvio Rodríguez Domínguez
any: 1967
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